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Artritis reumatoide y cansancio

Artritis reumatoide y cansancio: causas y soluciones

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La artritis reumatoide y el cansancio van unidos. Esta es una enfermedad compleja que va más allá del dolor articular. La fatiga y el agotamiento son síntomas comunes que pueden afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen.

Afortunadamente, con un enfoque integral y el apoyo adecuado, es posible manejar la fatiga y encontrar estrategias para lograr una mayor calidad de vida.

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Qué es la artritis reumatoide y cuáles son sus síntomas

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune crónica. Se caracteriza por la inflamación persistente en las articulaciones, lo que puede provocar dolor, rigidez, hinchazón y pérdida de función en las mismas. Aunque el dolor articular es uno de los síntomas más comunes, la artritis reumatoide y cansancio están relacionados, ya que esta condición también puede causar una variedad de problemas, como fatiga y agotamiento.

Artritis reumatoide y cansancio

La fatiga es un síntoma frecuente en las personas que la padecen, y puede manifestarse incluso cuando el dolor articular no es intenso. La fatiga en la artritis reumatoide no se debe simplemente al cansancio físico, sino que está asociada a la enfermedad misma y a otros factores relacionados.

La causa exacta de la fatiga en la artritis reumatoide no se conoce completamente, pero se cree que está relacionada con la inflamación crónica, el estrés físico y emocional, así como con alteraciones en el sistema inmunológico. La inflamación persistente en el cuerpo, característica de la enfermedad, puede agotar los recursos energéticos del organismo y afectar a la vitalidad de quienes la padecen.

Además, el dolor constante y la falta de sueño adecuado debido a la incomodidad pueden contribuir a la sensación de fatiga. La depresión y la ansiedad, que son comunes en personas con artritis reumatoide, también pueden aumentar la sensación de agotamiento y aumentar el cansancio.

Estrategias para manejar la fatiga relacionada con la artritis reumatoide y cansancio

Es importante tener en cuenta que, en la artritis reumatoide, el cansancio no se alivia simplemente con descanso o sueño adicional. A menudo, es una fatiga persistente y debilitante que puede afectar la calidad de vida de las personas que la padecen.

Para minimizar los inconvenientes de este efecto secundario de la condición, es fundamental adoptar un enfoque integral que incluya tanto el tratamiento médico como estrategias de autocuidado. Algunas recomendaciones para lidiar con la fatiga incluyen:

  1. Establecer una rutina de sueño adecuada y asegurarse de descansar lo suficiente.
  2. Realizar actividades físicas de bajo impacto, como caminar o nadar, para mejorar la resistencia y disminuir la fatiga.
  3. Tomarse descansos frecuentes durante el día y evitar la sobreexigencia física.
  4. Planificar y priorizar las actividades diarias, evitando el agotamiento.
  5. Mantener una alimentación equilibrada y saludable.
  6. Aprender técnicas de relajación y manejo del estrés, como la meditación o el yoga.
  7. Comunicarse con el médico especialista para evaluar opciones de tratamiento que puedan ayudar a aliviar la fatiga.

Establecer rutinas regulares de sueño, hacer ejercicio regularmente, y practicar técnicas de relajación como la meditación o el yoga son consejos que funcionan, aunque lo mejor es ir al origen del problema para encontrar la solución más efectiva.

Atajar el problema de raíz

Artritis reumatoide y cansancio

Mantener los huesos y músculos fuertes y sanos es fundamental para evitar lesiones. Seguir ciertas pautas asegura una mejor calidad de vida. Aquí hay algunas recomendaciones:

  1. Evitar el sedentarismo: pasar mucho tiempo sentado o inactivo puede debilitar los músculos y los huesos. Intenta romper el tiempo prolongado de sedentarismo con pequeñas pausas activas, como caminar o estirarte.
  2. Mantener un peso saludable: el exceso de peso puede ejercer presión adicional en los huesos y las articulaciones, aumentando el riesgo de lesiones. Mantener un peso saludable mediante una alimentación equilibrada y ejercicio regular es beneficioso para la salud ósea y muscular.
  3. Evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco: ambos pueden debilitar los huesos y aumentar el riesgo de lesiones. Reducir o eliminar su consumo puede ser beneficioso para la salud ósea y muscular.
  4. Ejercicio regular: fortalece los músculos y los huesos. Realizar ejercicios de fuerza, como levantamiento de pesas, y ejercicios aeróbicos de impacto, como caminar o correr, pueden ser beneficiosos. Consulta con un profesional de la salud para obtener recomendaciones específicas según tu condición física.
  5. Dieta equilibrada: consumir una dieta rica en calcio, vitamina D, proteínas y otros nutrientes es esencial para la salud ósea y muscular. Incluye alimentos como lácteos, pescado, frutas, verduras, legumbres y alimentos ricos en proteínas magras.
    • Calcio: el calcio es fundamental para fortalecer los huesos. Puedes obtenerlo a través de alimentos como lácteos, sardinas, almendras, brócoli y productos fortificados. Si tienes dificultades para obtener suficiente calcio de la dieta, existe la posibilidad de tomar suplementos.
    • Vitamina D: es esencial para la absorción adecuada de calcio. Exponerte al sol de forma segura y consumir alimentos como pescado graso, yema de huevo y productos fortificados puede ayudarte a obtener vitamina D. Si tienes deficiencia, es buena idea recurrir a los suplementos.

Hasta cierto punto, la artritis reumatoide y el cansancio que provoca se pueden gestionar. Aplicar los consejos en relación con dieta y estilo de vida puede ayudar a manejar la variedad de síntomas que provoca, tanto en relación con las articulaciones (dolor, rigidez, hinchazón y pérdida de función), como fatiga y agotamiento.

La fatiga en la artritis reumatoide puede ser debilitante y afectar la calidad de vida. Además de las estrategias mencionadas anteriormente, algunos suplementos que incluyan hierro y vitaminas del complejo B, pueden ser útiles para aliviar la fatiga en algunas personas. El silicio orgánico es otro elemento que no puede faltar, puesto que favorece la recuperación y aporta una protección adicional a las articulaciones. 

Además, también previene la aparición de la fatiga, algo que experimentan quienes incorporan a su dieta Silicium G5 Original o Silicium G5 Siliplant. complementar con más productos en formato líquido y. ¿Conoces Orgono Sport Recovery? Es muy eficaz mejorando la función muscular y regenerando tejidos. Y recuerda que, estos suplementos en formato líquido pueden complementarse con el gel Silicium G5 para uso tópico, que proporciona un alivio inmediato con su frescor y rápida capacidad de absorción.

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