Durante el embarazo el cuerpo experimenta numerosos cambios de todo tipo. Es algo normal y natural. Pero podemos reducir los efectos que producen gracias a determinadas sesiones, tratamientos y productos beneficiosos e inocuos. Es decir, que no afectan al bebé que estamos gestando. La rosa mosqueta para embarazadas es un muy buen ejemplo.
Esta planta tiene un especial poder curativo, regenerante e hidratante, como explicamos a continuación. Desvelamos por qué es tan buena, sobre todo para mujeres gestantes, además de cómo debes aplicarla para aprovechar al máximo sus excelentes propiedades.
¿Qué es la rosa mosqueta?
Es un arbusto silvestre en cuyos tallos nacen unas flores rosas y blancas. Originario de la Patagonia y de países como Perú o Chile, también se encuentra en otras regiones de Europa del Este. De la rosa mosqueta crecen unos frutos o escaramujos con forma ovalada, que contienen unas semillas. De éstas se puede obtener un aceite con múltiples beneficios, en particular para productos del sector de la cosmética y la dermatología.
Beneficios de la rosa mosqueta para las embarazadas
Gracias a las sustancias y nutrientes que tiene, la rosa mosqueta en embarazadas es muy importante tanto antes como después del parto. Todas estas ventajas aporta:
- Reduce la decoloración de la piel y ayuda a que desaparezcan las manchas.
- Estimula la producción de ácido hialurónico, lo que ayuda a mantener la piel firme, hidratada y elástica, gracias a que contiene vitaminas A, E, C, B1 y B2.
- Con su alta concentración de ácidos grasos esenciales, acelera la regeneración de los tejidos. Esto es necesario para acabar con las estrías y otras cicatrices que suelen aparecer después de una cirugía. En el caso de una cesárea o de una episiotomía, por ejemplo.
- La rosa mosqueta para embarazadas también favorece la circulación sanguínea, porque regula el ritmo de microvascularización.
- Contribuye a disminuir la aparición de celulitis, por la vitamina C y otros nutrientes con poder regenerativo de las células de la piel.
- Potencia la producción de colágeno, que igualmente reduce las arrugas superficiales y previene que se formen estrías.
- Por último, mejora el estado del cabello, que puede quedar más seco y graso con el embarazo.
Cómo usar el aceite de rosa mosqueta en el embarazo
En general, el aceite de rosa mosqueta en embarazadas podemos aplicarlo en cualquier parte de nuestro cuerpo. Pero lo más aconsejable es hacerlo después de una ducha con agua templada. Esto se debe a que la piel estará limpia y libre de impurezas. También es mejor usarlo antes de meternos en la cama.
Se recomienda echar varias gotas de aceite e ir masajeando la zona que queremos tratar durante unos minutos, con movimientos circulares. Igualmente se vende en formato de crema y se aplica de la misma manera. Recomendamos la de Silicium, por su contenido también en silicio orgánico, aceite de lavanda y cera de abeja. Por lo que nutre, calma e hidrata la piel.
En cuanto al mejor momento para utilizar un producto con rosa mosqueta para embarazadas, depende del objetivo que busques:
Para un mejor parto
Antes de dar a luz, es útil en las últimas semanas de gestación para evitar ciertos problemas durante el parto. Nos referimos a posibles desgarros, ya que la zona perineal puede sufrir un sobreesfuerzo cuando el bebé deba salir. Así que aconsejamos realizar masajes alrededor, pero sin contactar con las partes sensibles. Esto ayuda a aportar más elasticidad y flexibilidad. Dos aspectos importantes a la hora de la dilatación.
Para prevenir las estrías
Tanto antes como después del nacimiento de tu hijo o hija, puedes prevenir las estrías. ¿Cómo? Dándote masajes con el producto en zonas donde suelen aparecer: el pecho, las nalgas y el vientre. Tu piel ganará en hidratación y profundidad, algo beneficioso porque se estirará más conforme el bebé vaya creciendo.
En definitiva, así ayuda la rosa mosqueta a embarazadas, por sus propiedades ricas en vitaminas y antioxidantes. Sigue los consejos que te hemos dado aquí para usarla e intentar sacarle el máximo poder curativo, regenerativo e hidratante. Cuidar tu piel es importante durante el embarazo y tras el parto. Reduce los efectos que tiene sobre tu cuerpo.
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