Expositor de una tienda con verduras y hortalizas

Anteriormente ya te hemos contado para qué sirve el silicio orgánico y por qué es tan importante. Resumiendo, es un micronutriente esencial para la vida por su capacidad para estimular la síntesis de colágeno y elastina. De hecho, está presente en prácticamente todo el cuerpo: huesos, tendones, cartílagos, músculos, uñas, cabello, etc. Por ello, incorporar alimentos con silicio en la dieta es fundamental para mantenerlo en niveles apropiados en el organismo y estar sanos.

¿Qué te parece si te ayudamos a confeccionar tu próxima lista de la compra? ¡Sigue leyendo, que no te vas a tener que complicar nada!

¿Por qué es bueno comer alimentos con silicio?

Los múltiples beneficios del silicio orgánicoresponden por sí solos a esta pregunta. No solamente combate el paso de los años, sino que debido a sus propiedades también es imprescindible para los deportistas:

  • Conserva el brillo, la firmeza y la elasticidad de la piel, reduciendo arrugas, flacidez, varices, celulitis y estrías.
  • Mejora el aspecto general del cabello y evita la caída del pelo.
  • Mantiene las uñas fuertes y sanas.
  • Protege los huesos, músculos y articulaciones de su deterioro.
  • Favorece la salud cardiovascular, nerviosa y hepática.
  • Estimula la respuesta inmune.
  • Evita el déficit de vitamina D.

No cabe duda de que este mineral tiene una gran influencia en el bienestar. De hecho, la UNED recomienda en su Guía de Alimentación y Salud que se consuman al menos 15-35mg diarios.

Sin ese aporte es posible caer en un déficit de silicio, el cual provoca un envejecimiento de la piel, así como un cabello debilitado y uñas quebradizas. No solo eso, los huesos, músculos y articulaciones también se comprometen. Por lo tanto, aumenta el riesgo de padecer enfermedades relacionadas con la vejez: osteoporosis, artrosis, alzheimer, ateroesclerosis, etc. Además hay una mayor propensión a sufrir lesiones como esguinces o tendinitis.

¿Qué alimentos con silicio puedo encontrar?

Dado que es un elemento muy distribuido en la naturaleza, existen múltiples alimentos con silicio que puedes añadir a tu próxima lista de la compra. Los más destacables son:

  • Cereales integrales: avena, trigo, cebada, mijo marrón, centeno, quinoa o arroz. ¿Por qué integrales? Porque en el pericarpio (la cáscara) es donde se concentra una mayor cantidad de silicio.
  • Frutas: cítricos como limón, kiwi o naranjas, manzanas, fresas, aguacate, cerezas, uvas, plátano, mango… ¡El repertorio es increíble! Se recomienda tomarlas con piel, pero siempre muy bien lavadas.
  • Hortalizas: principalmente patatas, remolachas y maíz. Otras hortalizas interesantes son el pepino, las zanahorias, la cebolla, el apio, el rábano y el puerro.
  • Vegetales de hoja verde: espinacas, acelgas y lechuga. No dejes escapar tampoco las alcachofas y los espárragos.

También contienen silicio otros alimentos como los frutos secos (almendras, nueces…), las semillas (de girasol, de calabaza…), las legumbres (lentejas rojas, garbanzos…), el perejil, la soja o las algas.

¡Y los cerveceros estáis de suerte! La cerveza presenta una cantidad significativa de silicio: hasta 17mg en 300mL. Según un estudio, aquellas variedades con más cebada malteada y lúpulo son las más ricas en este mineral. No obstante, recuerda moderar su consumo y dar preferencia a las opciones sin alcohol.

El agua mineral también puede aportar bastante silicio dependiendo de su composición y de la región que provenga.

Por último, es importante destacar las plantas que son fuente de este oligoelemento. La cola de caballo, el bambú o la ortiga son algunos ejemplos que puedes incorporar a tu alimentación a través de infusiones.

¿Es necesaria la suplementación?

1. La dieta no suele ser suficiente

Habiendo tantos alimentos con silicio, puede que pienses que con alimentarse de forma variada y equilibrada es más que suficiente, ¿no?

En primer lugar ten en cuenta que los vegetales de los cultivos actuales tienen menos silicio debido al uso de abonos sintéticos, plaguicidas y otras sustancias químicas. Además, la cantidad de mineral que queda en dichos vegetales se pierde en su mayoría al cocinarlos.

Ante esto existen dos soluciones: comprar productos ecológicos y, si se puede, ingerirlos crudos.

Pero hay un par de hechos que no se pueden salvar y que hacen necesaria (o muy recomendable) la suplementación. Por un lado, el porcentaje de silicio que absorbemos es realmente muy bajo, ya que no lo metabolizamos demasiado bien. Por otra parte, con la edad se reducen sus depósitos en el organismo, especialmente a partir de los 35-40 años.

2. La solución: suplementos con elevada biodisponibilidad

En Silicium contamos con fórmulas de silicio orgánico que se caracterizan por asegurar una alta absorción del mineral. Con productos como Silicium G7 Original o G7 Activ+ puedes alcanzar los niveles en sangre que necesitas para mantener tu salud intacta. Además fortalecerás tu piel, cabello y uñas, así como reforzarás tus huesos, músculos y articulaciones.


Botón post G7 Original_ES

En cualquier caso, recuerda que siempre debes seguir una alimentación saludable. Ante un déficit evidente de silicio, no dudes en acudir a un especialista que sepa aconsejarte o ponerte en contacto con nosotros ¡Estaremos encantados de ayudarte personalmente! 




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